La localidad estrena un servicio de acompañamiento gratuito para mayores que viven solos

Almendralejo pone en marcha esta semana el primer programa de 'Acompañamiento en soledad no deseada para mayores de la región', que cuenta con financiación del Servicio Extremeño de Protección y Atención a la Dependencia (Sepad). La concejala de Asuntos Sociales, Isabel Ballesteros, presentó ayer esta nueva iniciativa, pionera en la región, en el transcurso de la IX Semana del Mayor, que se está celebrando en el salón de actos de El Obrero Extremeño hasta el viernes.

Este programa, que dispone de una mesa informativa en este espacio expositivo, cuenta con una financiación de 214.000 euros del Sepad en esta primera anualidad, mientras que la aportación económica municipal «es mínima», según destacó la edil.

Mayores de 65

El programa se va a poner en marcha esta semana y beneficiará a las personas mayores de 65 años que viven solas en sus domicilios, a los que se les ofrecerán todos los servicios de los que dispondrían en una residencia.

Así los servicios que se prestarán van desde compra de alimentos y preparación de comidas en el domicilio al arreglo de ropa y planchado, además de los servicios especializados de podología, terapia ocupacional, fisioterapia, acompañamiento o atención psicosocial.

Para prestarlos, el Ayuntamiento ha contratado a personas que trabajaban en el antiguo hospital de San Juan de Dios y que no fueron subrogados a la nueva empresa gestora, Ribera Salud. Entre ellos hay cinco gericultores, un auxiliar de clínica, un fisioterapeuta, un psicólogo y un terapeuta ocupacional.

Beneficiarios

Tras meses trabajando para poner en marcha este programa, ya se cuenta con 32 expedientes completos de mayores, que ya han sido verificados tras las consultas realizadas a los centros de salud de la localidad. Ellos han sido los que han derivado a personas mayores que cuentan con un perfil que les hace aptos para participar en el programa.

Además, hay otros 20 expedientes en trámites, por lo que la edil cree que se podría llegar a tener una demanda de entre 200 y 250 personas mayores.

La concejala destacó la importancia de este tipo de programas de acompañamiento para aplazar la institucionalización de muchos mayores que tienen cierta autonomía, aunque no cuenten con familiares que cuiden de ellos.

De esa forma pueden mantenerse unidos más tiempo a su vivienda familiar y a su entorno social, cosa que abandonarían en el caso de ser ingresado en una residencia de mayores. Todos estos servicios se prestan de forma gratuita.

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