El Extremadura jugará ante el Real Unión pese a las dos nuevas bajas

La plantilla del Extremadura se desangra poco a poco. Los efectivos con los que cuenta el entrenador, Manuel Mosquera, cada vez son menos. Día a día van desapareciendo jugadores del club azulgrana, que hace unos años era el buque insignia del fútbol regional y que ahora está en serios problemas para seguir existiendo. Las dos últimas semanas han sido duras para la afición, que ha asistido a la desbandada de los mejores futbolistas mientras en el club se guarda el más absoluto silencio.

Pese a todos los problemas, el Extremadura jugará su partido en Irún. En el club tienen claro que el choque en tierras vascas se va a disputar y para ello se harán las fichas profesionales necesarias a jugadores del filial para poder competir. Así, el equipo viajará el viernes por la mañana hasta Irún y jugará el sábado por la tarde, tal y como se tenía previsto antes de todos los problemas que le han surgido al club durante esta semana. Y eso a pesar de que ayer otros dos futbolistas se marcharon: Toribio y Gato. Ambos dejan de pertenecer a la disciplina azulgrana después de obtener la carta de libertad, y se suman a las nueve bajas anteriores del conjunto almendralejense. La plantilla se ha quedado con solo dos jugadores con ficha del primer equipo entrenando, Morcillo y Casto, y el concurso de ambos en el partido del sábado ante el Real Unión de Irún está aún en el aire.

Toribio era uno de los futbolistas que aún tenían ficha en el Extremadura, pero que no estaban entrenando a las órdenes de Manuel Mosquera durante esta semana en la Ciudad Deportiva de Almendralejo. El mediocentro ha ejercido esta temporada como capitán en algunas ocasiones y ha sido uno de los defensores del vestuario durante todos los meses que la plantilla ha sufrido los efectos de los impagos. El de Salt (Girona) se marcha de Almendralejo tras una temporada y media de azulgrana y buscará nuevos retos. Con una amplia trayectoria en Segunda División, a Toribio no le faltarán ofertas para continuar jugando al fútbol durante la segunda vuelta de esta temporada, y en breve se unirá a otro equipo para volver a disfrutar del deporte rey.

Por su parte, Gato sí era uno de los jugadores con ficha del primer equipo que seguía entrenando durante esta semana. El lateral derecho cordobés se ejercitó a las órdenes de Manuel Mosquera el lunes y el martes, pero ayer ya no se presentó en las instalaciones de la Ciudad Deportiva de Almendralejo y a media mañana se oficializó su salida.

Opción de inversores

La directiva del Extremadura, encabezada por Manuel Franganillo, sigue buscando un grupo inversor que se haga cargo del club y que pueda realizar una inyección económica con la que salvar la situación económica.

Radiogolex confirmó ayer que el empresario Javier Páez, sobrino del expresidente del Real Betis Manuel Ruiz de Lopera, estaría interesado en adquirir un paquete accionarial del Extremadura para invertir dinero en el club almendralejense.

Este sería un movimiento del club a la desesperada para intentar salvarse de la liquidación inminente. Es una operación complicada que no asegura la viabilidad futura de la entidad almendralejense y que se podría fraguar en las próximas semanas. Es una de las pocas opciones del Extremadura para seguir con vida y que la jueza no decrete que el club entra en fase de liquidación.