El Extremadura y su espada de Damocles

El Extremadura todavía no ha resuelto sus problemas económicos que podrían propiciar que el club se liquidase la próxima semana. La entidad almendralejense, con su presidente, Manuel Franganillo, a la cabeza continúa buscando soluciones en forma de inversión para que el club pueda seguir adelante y que el partido de este sábado ante el Racing de Santander no sea el último.

La posible liquidación del club es la espada de Damocles del Extremadura. El equipo de Manuel Mosquera sigue entrenando en la Ciudad Deportiva de Almendralejo como cada semana para preparar los partidos de liga lo mejor posible, mientras que el peligro de la desaparición se cierne sobre el club cada día.

En los últimos meses no ha habido solución para todas las vicisitudes que tiene el Extremadura y el tiempo se agota. La titular del Juzgado de lo Mercantil de Badajoz le dio a la entidad un plazo para solucionar la llegada de inversión que se acaba la próxima semana. Si la jueza no ve que se solucione el problema decidiría comenzar los trámites para liquidar el Extremadura UD.

Por eso, Manuel Franganillo sigue buscando día tras día la financiación que sirva para alargarle la vida al club. El máximo mandatario azulgrana ha tenido varias reuniones en Madrid para intentar solventar la papeleta, pero de momento no hay solución.

Y mientras tanto, la plantilla, cuerpo técnico, algunos trabajadores y el presidente aprovecharon ayer para celebrar la comida navideña en un restaurante de Mérida. El club publicó una foto con el lema 'Unidos para salvar un sentimiento' en la que se ve a los jugadores sonrientes posando con el presidente, Manuel Franganillo.

Problemas en el Racing

Por otro lado, dos jugadores del Racing de Santander están confinados a causa de la covid a solo cuatro días del partido en el Francisco de la Hera ante el Extremadura. El lateral Isma López ha dado positivo y el guardameta Lucas es contacto estrecho de otro caso, por lo que ambos están confinados desde ayer en sus domicilios.

Los demás componentes de la plantilla y del cuerpo técnico del conjunto cántabro se sometieron ayer a una prueba de antígenos para saber si había algún miembro del vestuario que también diese positivo, pero las pruebas de todos arrojaron resultados negativos.

El Racing de Santander seguirá haciendo pruebas de antígenos durante esta semana y tendrá que extremar precauciones durante los entrenamientos, aunque la celebración del partido ante el Extremadura no corre peligro, ya que debe de haber cuatro positivos en el equipo para que se aplace el choque. Así, el Racing viajará el viernes a tierras extremeñas.