Critican que se prohíba quemar restos de poda en el campo

La Comunidad de Labradores y Ganaderos de Almendralejo acusa a la Junta de Extremadura de «atacar» a los agricultores con la prohibición de la quema de sarmientos y ramón del olivo procedentes de la poda durante todo el año, con las excepciones de que existan determinadas plagas en la explotación.

Asimismo, reclaman al presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara, que identifique al comité de expertos que aconseja «triturar los restos de poda en lugar de quemarlos».

En opinión de esta organización asociada a APAG-Asaja, se trata de una normativa «represora, impositiva y antiprogresista» y creen que lo que se pretende es «perseguir y amenazar» a los agricultores con sanciones económicas.

La Comunidad de Labradores exige a la consejera de Agricultura, Begoña García Bernal, que suprima el artículo del Plan Infoex en el que se prohíbe esa quema, o que lo modifique para que le encuentre el «encaje legal necesario», como aseguran que han hecho otras comunidades autónomas, para que se puedan seguir quemando esos restos de poda durante la época de escaso riesgo de incendio.

De lo contrario, afirman, debería dimitir y «dejar paso a quien pueda velar por la viabilidad de las explotaciones agrícolas», porque consideran que utiliza a la Unión Europea como escudo para «esconder su desmedida incompetencia» para defender los intereses de los productores agrarios, en una región eminentemente agrícola y ganadera.

Además, muestran su apoyo a las medidas anunciadas por APAG Extremadura ASAJA, tanto en lo que respecta al recurso que presentará contra esta orden, como a la concentración convocada para el próximo 11 de noviembre ante la Presidencia de la Junta.