El Ayuntamiento rectifica y permite que las discotecas del ferial cierren a las ocho y sábado y domingo, a las nueve de la mañana

El Ayuntamiento de Almendralejo finalmente permitirá que las discotecas del recinto ferial cierren durante la Feria de la Piedad a las ocho de la mañana dos días y el sábado y el domingo lo podrán hacer hasta las nueve de la mañana.

Esta decisión ha sido recogida en un bando de la Alcaldía, que fue emitido en la tarde del viernes. Ello supone una rectificación sobre la decisión anunciada hace unos días de que el cierre se establecería a las siete de la mañana.

El alcalde, José María Ramírez, aseguró que esa hora es la que habían aconsejado los representantes de las fuerzas de seguridad en la junta de seguridad celebrada con presencia del subdelegado del Gobierno en la provincia de Badajoz, Francisco Mendoza.

El bando emitido esta tarde apunta que el nuevo horario se ha establecido previa autorización del órgano competente de la Junta de Extremadura y que afecta a los establecimientos de hostelería. Los cafés, bares, restaurantes, bares especiales y terrazas podrán tener abierto hasta las 4.00 de la mañana.

Las discotecas y cafés concierto lo harán hasta las 6.00 de la madrugada.

En cambio, las casetas del recinto ferial podrán abrir hasta las 8.00 horas y los días 13 y 14 hasta las 9.00 horas.

Además, recuerdan que el denominado 'botellón' se llevará a cabo en el lugar determinado al efecto en la zona habilitada detrás del recinto ferial.

Asimismo, se recuerda a los establecimientos la prohibición de vender o dispensar a los menores de edad bebidas alcohólicas, hecho que será vigilado y sancionado en su caso por la Policía Local; así como a los menores la de consumir este tipo de bebidas.

«Se ruega a los titulares de establecimientos y a los usuarios de los mismos respeten, sobre todo en las últimas horas, el derecho al descanso de quienes así lo decidan. Es comprensible que después de más de dos años de restricciones por motivos sanitarios, exista un deseo de diversión, pero se pide encarecidamente que impere la alegría y que ésta no se empañe por actitudes incívicas o por un consumo irresponsable», concluye el bando.